Ahorro de tiempo y dinero: Al no requerir desplazamientos, las juntas virtuales ahorran tiempo y gastos de transporte para los propietarios. No es necesario realizar viajes para asistir a la reunión, lo que puede ser especialmente beneficioso en comunidades donde los propietarios viven lejos del lugar de la reunión. Esto también implica un ahorro de costos en términos de combustible, estacionamiento u otros gastos asociados con el desplazamiento físico.
Flexibilidad horaria: Las juntas virtuales brindan flexibilidad en cuanto a la programación, lo que facilita la participación de un mayor número de propietarios. Al no tener fácil que coincidir con horarios de desplazamiento específicos y reservar espacios físicos, es más encontrar una fecha y hora que se ajuste a las necesidades de la mayoría de los participantes. Esto aumenta la posibilidad de una mayor asistencia y participación en las decisiones importantes de la comunidad.
Grabación y documentación: En las juntas de propietarios virtuales, es posible grabar las sesiones y disponer de un registro digital de la reunión. Siempre con la autorización de los propietarios. Esto puede ser útil para aquellos propietarios que no pueden asistir en tiempo real y desean ponerse al día posterior. Además, tener un registro digital facilita el acceso y la consulta de la información discutida y las decisiones tomadas durante la junta.
Mayor participación y debate equitativo: Las juntas virtuales pueden fomentar una mayor participación de los propietarios tímidos o introvertidos que pueden sentirse más cómodos expresando sus opiniones de forma escrita o virtual. Además, la estructura de las juntas virtuales permite un mayor equilibrio en los tiempos de intervención, impidiendo que unos pocos propietarios acaparen el tiempo de discusión, lo que puede suceder en reuniones presenciales.
Eficiencia en la toma de decisiones: Las juntas virtuales pueden facilitar una toma de decisiones más eficiente. Al eliminar las limitaciones físicas, es posible convocar juntas con mayor frecuencia si es necesario, lo que permite una respuesta más rápida a problemas urgentes o la discusión de temas que requieren una atención inmediata. Además, la posibilidad de utilizar herramientas de votación en línea puede agilizar el proceso de toma de decisiones, impidiendo la necesidad de contar manualmente los votos.
En resumen, las juntas de propietarios virtuales ofrecen una serie de beneficios, como la accesibilidad mejorada, el ahorro de tiempo y dinero, la flexibilidad horaria, la grabación y documentación, una mayor participación y debate equitativo, y la eficiencia en la toma de decisiones . Estas ventajas hacen que las juntas virtuales sean una opción atractiva para las comunidades de propietarios en la actualidad.